Vivimos en una era increíble, donde los límites entre lo local y lo mundial, lo privado y lo público, lo virtual y lo real se difuminan gracias a las redes sociales. Esta falta de límites puede facilitar nuestras vidas y darnos la oportunidad de decir y hacer lo que queramos. Por otro lado, la ausencia de limitaciones también puede llevar a una invasión voluntaria o involuntaria del espacio de alguien. Ocurre en todos los niveles: personal, familiar, corporativo y otros.

En particular, las redes sociales contribuyen a esta confluencia de límites en los que las personas publican constantemente sus fotos, publicaciones o comparten publicaciones de terceros, lo que podría afectar la privacidad de otra persona, depende de lo que se haya compartido. Dejando de lado los pequeños malentendidos, a menudo escuchamos casos en los que la reputación de una empresa se ha visto dañada debido a la deslealtad de su gerencia o empleados. Desde mi perspectiva, la causa de tales situaciones no es el sabotaje intencional, sino a menudo una mala interpretación de lo que está permitido.

Me especializo en consultoría corporativa que ayuda a construir la comunicación y las relaciones en las empresas. Además de las preguntas sobre las interacciones horizontales y verticales, el fortalecimiento del espíritu de equipo y el aumento de la lealtad, muchas de las empresas con las que trabajo están preocupadas por el efecto de las redes sociales en el lugar de trabajo y la regulación del comportamiento de sus empleados en el espacio online.

Mi opinión es que las regulaciones necesarias deben ser prescritas. Una persona debe entender los límites para que se sienta segura, comprenda las reglas del “juego” y experimente un sentido de pertenencia. Por lo general abogo por que las regulaciones deben establecer no solo lo que está prohibido, sino también las cosas que son bienvenidas. Además, la explicación de las razones de cada regla aumenta la motivación para seguirlas.

A continuación hay tres pasos para brindar orientación a tus colaboradores sobre cómo pueden utilizar positivamente las redes sociales:

1. Explicar el equilibrio entre la autoexpresión y la representación de la empresa.

Las empresas deben hacer hincapié en respetar el derecho de cada empleado a su espacio personal en las redes sociales, lo que esencialmente es otra forma de expresarse. Sin embargo, cada empleado debe comprender que forma parte de un equipo y representa a su empresa, lo que refleja ciertas responsabilidades y valores.

El proceso de infusión de dicho equilibrio en tu equipo se basa en tres puntos: elegir, capacitar y demostrar. Comienza con la contratación de los empleados adecuados, aquellos que comparten los valores de la compañía. Para aquellos que ya están trabajando dentro de la compañía, es importante exponer los valores de la compañía a través de capacitación y talleres, junto con atributos visuales. Finalmente, el paso más efectivo (y a menudo pasado por alto) es adherirse a los valores corporativos en cada nivel. Esto enfatiza que los valores no sean solo palabras, sino una realidad mutua.

2. Anima a tu equipo a compartir dónde trabajan.

Una indicación del lugar de empleo en los perfiles sociales de tus colaboradores también es muy bienvenida. Primero, demuestra lealtad, y segundo, promueve la compañía. Por otro lado, es importante explicar a los empleados las consecuencias de ciertas declaraciones y el impacto que pueden tener en la reputación de una empresa. Por ejemplo, una declaración negativa sobre la religión, nacionalidad o raza de una persona podría asociarse erróneamente con la mentalidad de la empresa.

3. Pídeles que especifiquen cuándo algo es su propia opinión.

Además, al mencionar una compañía en publicaciones y comentarios, los empleados deben hablar solo en su propio nombre y dejar claro que su declaración es estrictamente su opinión personal, no la posición oficial de la compañía para la que trabajan. Es importante utilizar las declaraciones “yo” en lugar de “nosotros”.

Por supuesto, estas regulaciones imponen cierta responsabilidad a los gerentes y propietarios de la compañía, quienes son responsables de promover y entregar estas reglas a cada miembro del equipo. La transparencia de las redes sociales también motiva a la gerencia a establecer relaciones públicas intra-corporativas que monitorean la negatividad de los empleados y previenen conflictos antes de que se manifiesten en las redes sociales. Para facilitar este proceso, creo que se debe implementar un procedimiento único para recopilar comentarios y sugerencias entre el personal. En mi experiencia, es una de las claves de la gestión efectiva de la comunicación corporativa.

Hay algunas opciones para hacer esto: Lo primero es crear un foro corporativo donde los empleadores puedan intercambiar sus opiniones y hacer preguntas a sus colegas. Sin embargo, cuando se trata de comentarios negativos, la mayoría de las personas prefieren el anonimato. En estos casos, recomiendo que las empresas guarden una pequeña casilla donde todos puedan poner notas que se revisan y responden una vez al mes. Muestra a los empleados que sus voces son escuchadas.

En conclusión, el uso de las redes sociales en el entorno corporativo actual funciona de una de estas dos formas: puede fortalecer la reputación de una empresa o puede causar daños difíciles de restaurar. Creo que los grandes líderes centran sus esfuerzos en la prevención en lugar de resolver conflictos que ya se han manifestado.

Fuente: Velumyan, Naira. “How To Teach Your Team To Use Social Media Responsibly”. Forbes
https://www.forbes.com/sites/forbescoachescouncil/2019/06/06/how-to-teach-your-team-to-use-social-media-responsibly/#7faaab857b3d