La honestidad y la confiabilidad son más importantes que nunca, en un contexto donde la confianza pública es atroz y existe un público dividido. ¿Cómo puede el portavoz proyectar una presencia auténtica que lo ayude a influir a las audiencias?
La autenticidad se ha convertido en una especie de palabra de moda en los últimos tiempos. Es un término que parece aplicarse cada vez más a casi todo, desde líderes y marketing hasta muebles y ropa.
Aunque todos parecen estar buscando autenticidad, pocas personas pueden definir lo que es. Búscalo en el diccionario y encontrarás términos como genuino, preciso, confiable y original. Cuando se aplica a las personas, se define mejor como “ser uno mismo”.
Sin embargo, cuando se trata de entrevistas con los medios, no es tan simple.
Donald Trump tiene muchos defectos, pero sería difícil argumentar que no es él mismo cuando aparece frente a las cámaras y da discursos. Es un enfoque que le ha ganado tantos admiradores como críticos. En el otro extremo de la escala está Theresa May, quien, particularmente durante la última elección general, parecía incapaz de ir más allá de los rígidos mensajes preparados previamente. Fue un enfoque que la dejó apodada “la Maybot” y dejó al Reino Unido con un gobierno que no es “fuerte ni estable”.
¿Qué significa, entonces, ser auténtico para los portavoces ante los medios? Aquí hay seis formas de proyectar sinceridad durante cualquier presentación:
1. El portavoz auténtico se auto edita.
Ser un portavoz auténtico no es simplemente decir lo que venga a la mente y ser completamente uno mismo. Si bien puede ir en contra de la definición del diccionario, cuando hablamos de portavoces auténticos, aquellos que supervisan y eligen sus palabras con cuidado son los que mejor son recibidos por los medios y el público. Están en sintonía con su audiencia, son conscientes de los límites y saben qué motivará a las personas a tomar medidas positivas y qué hará que los ignoren.
2. El portavoz auténtico da mensajes en sus propias palabras.
Cuanto más natural suena un mensaje, es más probable que el público sienta que el portavoz realmente cree lo que está diciendo. Para lograr esto, es crucial que, mientras los voceros aún deben prepararse a fondo, no memoricen su información y sus mensajes para que parezcan que están regurgitando una nota de prensa o un comunicado.
Los portavoces deben sentirse capacitados de dar los mensajes en sus propias palabras (dentro de las pautas corporativas). Este enfoque no solo ayuda a que los mensajes cobren vida y tengan autenticidad, sino que también aumentará la confianza del vocero y le hará sentirse más cómodo con lo que dice.
3. El portavoz auténtico es humano.
Para ser un auténtico portavoz ante los medios de comunicación, debes expresar sentimientos y mostrar vulnerabilidades. Esto no quiere decir que un discurso de aceptación al estilo Oscar, lleno de lágrimas, sea siempre apropiado. Algunos temas obviamente se prestan a este estilo de dar mensajes de una manera mucho más natural.
Podría ser tan simple como admitir errores, compartir lo que te mantiene despierto por la noche, lo que te pone nervioso o lo que te emociona, aunque debes tener cuidado de evitar el cliché de estar “emocionado de anunciar”.
En una situación de gestión de una crisis de reputación, la autenticidad consiste en demostrar que realmente te preocupas por los afectados. Aunque mostrar emoción en una entrevista puede sentirse incómodo y quizás ocasiones que los voceros se sientan tímidos, puede ser atractivo e interesante para la audiencia.
4. El portavoz auténtico se basa en su experiencia personal.
Los ejemplos más poderosos es aquella experiencia que es personal para el portavoz y que se conecta con la audiencia. Las historias personales y las anécdotas ayudan a que la marca sea relevante, brindan un lado humano a la organización y ayudan a los portavoces a crecer en confianza.
5. El portavoz auténtico es implícitamente honesto.
Los portavoces auténticos son confiables, sinceros y honestos, pero la clave es que la honestidad sea sutil y no anunciada. Usar frases como “Voy a ser honesto contigo” o “… para ser honesto” socavará tu credibilidad y sugerirá a la audiencia que no has sido sincero durante el resto de la entrevista.
6. El portavoz auténtico destierra el lenguaje o jerga técnica.
El idioma es una parte clave de ser un auténtico portavoz ante los medios de comunicación. Algunos representantes optan por palabras y frases que creen que pueden hacer que se vean más inteligentes o que se basen en el lenguaje técnico y las siglas de su sector, pero el problema con estos dos enfoques es que pueden alejar a la audiencia.
Para ser un portavoz auténtico, debe ser capaz de crear una conversación que suene natural utilizando el idioma que usarías si estuviera hablando con un amigo en una cafetería o pub.
En términos de entrevistas con los medios, ser auténtico significa ser uno mismo, pero con un toque de destreza para asegurarte de evitar las trampas de compartir experiencias, emociones o sentimientos. Aunque puede parecer una contradicción hablar de entrenar a alguien para que sea auténtico, es la única forma de desarrollar la habilidad, el cuidado y la habilidad necesarios para que se perciba que tiene este rasgo raro.
Fuente: Fisher, Adam. “6 ways a spokesperson can embody authenticity”. PR Daily
https://www.prdaily.com/6-ways-a-spokesperson-can-embody-authenticity/