Relaciones Públicas. ¿Está sobrevalorado el concepto de ética? Hagamos una pausa y pensemos en esto.
¿Qué son las relaciones públicas? En esencia, las PR son nuestra herramienta relacional con el mundo exterior o con una gran audiencia más allá de nuestra esfera interna.
Teniendo esto en cuenta, ¿es posible presentarse ante una audiencia externa de manera diferente a como uno se presenta a puertas cerradas? Si tu respuesta es sí, la siguiente pregunta es: ¿cuánto tiempo se puede mantener esa imagen?
Ahora, profundicemos en la ética. La ética representa los principios morales entre el bien y el mal. Los organismos profesionales adoptan códigos éticos específicos para guiar el comportamiento y defender sus valores. Estos códigos no son arbitrarios; reflejan los valores de la organización.
Reflexiona un momento: ¿has considerado los valores que adoptas? ¿Los respetas de manera constante? Todos tenemos valores que impulsan nuestras acciones, consciente o inconscientemente.
Se espera que los profesionales de las relaciones públicas defiendan principios éticos clave como la integridad, la honestidad, la confiabilidad, la transparencia, etc. Como profesional, ¿puedes defender estos valores si ni siquiera los defiende a puertas cerradas? La integridad y la confianza están entrelazadas, y la confianza surge de manera natural cuando hay integridad. Pero, ¿cómo generamos confianza en una era de desinformación?
Probablemente hayas escuchado diferentes frases que reflejan escepticismo hacia algunas iniciativas de relaciones públicas que pueden ser percibidas equivocadamente. Este escepticismo surge porque las personas reconocen cuando se les presenta una imagen falsa. Las acciones de relaciones públicas practicadas sin ética, se perciben gradualmente como una mera gestión de la percepción, a menudo desconectada de la realidad de la marca.
Generar confianza en el mundo actual es sencillo pero desafiante: requiere autenticidad.
Toda marca, ya sea personal u organizacional, tiene valores subyacentes, ya sean reconocidos o no. Generar confianza requiere demostrar constantemente estos valores internalizados en el dominio público. No se puede mantener la confianza si no se han internalizado ciertos valores éticos. Si bien las percepciones se pueden crear, no se pueden mantener si no reflejan un estado interno auténtico.
Generar confianza requiere dos elementos clave: autenticidad y coherencia. ¿Quién eres? ¿Por qué haces lo que haces? ¿Qué impulsa lo que haces? No puedes ser genuinamente algo que no eres. Si bien puedes intentar proyectar una personalidad, tu verdadera naturaleza eventualmente se revelará.
Las relaciones públicas no deben ser una herramienta para crear personalidades falsas. En cambio, deben permitir la representación veraz de la esencia de una marca. La confianza solo se puede construir y mantener a través de la autenticidad y el compromiso con los valores éticos.
En conclusión, mantener valores sólidos de manera constante es nuestro escudo y defensa en la era de la desinformación. Las relaciones públicas son más efectivas cuando reflejan valores genuinos, creando una confianza y una conexión duraderas con la audiencia.
Fuente: Oruamabo-Agorua, Idu. “The role of ethics in public relations: Authenticity in the era of misinformation”. Premium Times
https://www.premiumtimesng.com/opinion/715304-the-role-of-ethics-in-public-relations-authenticity-in-the-era-of-misinformation-by-idu-oruamabo-agorua.html